A veces nos complicamos la vida buscando soluciones para pequeños problemas domésticos o culinarios, y no nos damos cuenta de que con trucos hechos a base de sustancias sencillas y muchas veces naturales, podemos poner solución a esos problemillas.
En este caso hablaremos del bicarbonato de sodio, muy útil para tener siempre para aplicarlos en trucos caseros.
Truco primero: Muy útil para limpiar el horno
Ponemos bicarbonato de sodio humedecido en la parte inferior del horno y dejamos reposar toda la noche. Al día siguiente el bicarbonato habrá actuado y solo quedará limpiar la suciedad con una esponja o estropajo suave. Habrás limpiado esas manchas tan difíciles de quitar con muy poco esfuerzo.
Truco 2: Evitar el mal olor en el refrigerador
Si colocamos un recipiente con bicarbonato en la parte posterior de la nevera, el bicarbonato mantendrá a raya los malos olores. Pero si el olor es intenso por algún alimento que se nos olvidó y no sale fácilmente, es mejor vaciar la nevera totalmente, limpiar bien y por último poner el recipiente con bicarbonato durante unas horas con la nevera vacía.
Truco 3: Para limpiar las hortalizas
Muchas veces hemos oído trucos para limpiar bien las verduras antes de cocinarlas, que si agua con lejía, que si vinagre otras veces. Pero puede llegar a ser tóxica esta manera de limpiarlas.
Menos agresiva para la salud es utilizar bicarbonato de sodio, espolvoreando con éste las verduras y lavándolas bien después. De esta manera limpiaremos bien las hortalizas sin dañarlas, eliminando restos de ceras e incluso los peligrosos pesticidas.
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